(You can also read this review in English)
Me
ha gustado, pero no sé el porqué. Tal vez si escribo una reseña
pueda poner mis pensamientos en orden. Y, quizás, podría explicarlo
a los amables lectores y lectoras del blog.
Recientemente
leí una conversación sobre autores literarios y no literarios en el
género de ciencia ficción. M John Harrison pertenece sin duda al
primer grupo. Su ciencia ficción es ... ¿hard?
No lo creo, aunque su base científica parece sólida. ¿Space
opera?
Puede, pero está a años luz de otros autores que conozco (excepto
quizás el malogrado Iain Banks). ¿Ciencia ficción weird?
En realidad, esta cuestión no es importante: pienso que es bueno que
un autor sea inclasificable.
Esta
es la tercera novela de una trilogía. La primera es Light
(2003,
Luz
en
la edición española), y estoy de acuerdo con una crítica que en su
momento dijo que Light
es brillante.
Acerca de la segunda, Nova
Swing
(2007),
confieso que apenas terminé el libro. Así que cuando he empezado
Empty
Space: A Haunting
(2012)
lo he abordado con una actitud diferente: es decir, de una manera
menos racional y más orientada al disfrute de la lectura. Y ha
funcionado... más o menos. Sí, ha sido un placer leer la prosa de M. John Harrison pero bueno, un reto de lectura también,
especialmente si uno debe dedicarle ratos libres en vez de tardes
enteras.
Gracias
a mi lector Kindle
y
su diccionario (si lees en otros idiomas debes probar la función
Word
Wise
como
atajo para las definiciones, pero en este caso el idioma inglés fue
el menor de mis problemas). Con frecuencia he tenido que usar la
función buscar
en el libro,
buscando palabras o acrónimos, detalles, significados o pistas, o
cualquier cosa que podría haber perdido en capítulos anteriores que
no me permitían entender completamente lo que estaba leyendo. Esto y
relecturas de capítulos enteros, por supuesto. Como he dicho, las
obras de M. John Harrison no son una experiencia fácil para el
lector.
Ambas portadas tienen que ver con la obra : ) |
En
cuanto a argumento y los personajes: en nuestro siglo XXI, Anna Waterman,
una mujer depresiva de cincuenta y tantos años que ignora cómo
superar su desastroso matrimonio con Michael Kearney (un personaje
difunto de Luz,
sus desquiciados estudios condujeron al descubrimiento del viaje
interespacial). Mientras tanto, en otro lugar y futuro lejanos, una mujer conocida
como la
asistente
no
sabe nada de sí misma: ignora quién alteró su organismo (tailored
en
inglés) otorgándole increíbles habilidades, como un radar interno
de frecuencia de 27 a 40 GHz, y también una total sensación de
anomia de tal manera que ni tan solo posee un nombre propio (el autor
dedica algunas páginas explicando todos los nombres que la
asistente está considerando sin decidirse por ninguno).
Y en este mismo futuro, Fat Antoyne, Liv Hula e Irene The
Mona,
la tripulación de la nave Nova
Swing,
tienen la desconcertante misión recoger unos misteriosos objetos
alienígenas conocidos como mortsafes.
M.
John Harrison juega con el lenguaje y fuerza su sentido de una manera
que sugiere asombrosas maravillas. Y sobre los diálogos, son
exquisitos. Creo que el autor, aunque se dedique a sumergirnos en el
extraño universo de sus novelas, sabe muy bien cómo describir la
naturaleza humana. Como el artista que es capaz de pintar un
retrato o paisaje perfecto, pero se inclina por el arte abstracto: es
un genio y puede hacer todo lo que desee. La sensación es que te
pierdes muchos detalles que solo podrás descubrir con una segunda o
tercera lectura. Me doy cuenta de lo terriblemente inteligente que
debe ser el autor (¡Y de cuánto le envidio!).
Sin
embargo, no quiero transmitir la sensación de que Empty
Space: A Haunting
es
una obra maestra. En mi opinión, no es una novela redonda ni mucho
menos. Y siendo ya la tercera de la trilogía, empiezo a ver algunos
trucos del autor.
Entonces,
¿vale la pena la lectura? Sí, si te gusta la literatura. Sí, si te
gusta encontrar momentos de un asombroso sentido de la maravilla,
pero como lector de ciencia ficción no sé aún si esto es una broma
cósmica o si simplemente el autor se ríe de nosotros.
Para
comprender mejor toda la trilogía, debería volver a leer Luz.
Y también Nova
Swing
(¡Ains!).
Y por supuesto también debería releer este que tengo entre manos,
pero sucede que nos dejamos cautivar por las novedades y nos
olvidamos de deleitarnos de la buena literatura como los libros de M.John Harrison.
Realmente
no sé si debería recomendar el conjunto de trilogía, pero si no la
habéis leído aún os recomiendo Luz, que sigue siendo una de mis
novelas preferidas de ciencia ficción y que es una de las muchas joyas
de la colección Bibliópolis
(Nova
Swing
también
está publicada por la misma editorial, Empty Space en fecha de hoy no está traducida).
Me gusta tu reseña. Creo que resumes bien las sensaciones encontradas que te producen estos libros. No he leído nada de Harrison y no sé si me arriesgaré, pero he pasado un buen rato aquí :)
ResponderEliminarHola Mertonio, muchas gracias por tu comentario (y perdón por la demora en la respuesta).
EliminarHombre, yo me atrevería con "Luz". Si es el caso ya me dirás qué te parece ;-)