The Freeze-Frame Revolution by Peter Watts.

I love how Mr. Watts writes. I like his pessimism and his vital cynicism, and above all, I adore his perspective of life and intelligence. In this novel the author maintains the level of controlled madness that has us accustomed but unfortunately I have not understood the end. For me this is a nonsense and apparently I am not the only one.

You can see the plot on the cover of the book, a really interesting approach, as well as its development throughout the novel, but as I have already mentioned the problem of the novel is the last part. Perhaps it has different meanings, or simply the last chapter was not necessary, I do not know.

For what it is worth, Peter Watts' The Freeze-Frame Revolution (2018) evokes me these two novels, by some aspects of the argument that I will not explain (because spoilers): on the one hand Dark Star by Alan Dean Foster and on the other Marrow by Robert Reed.

I must indicate that this novel is complemented by other stories that the author has published and that I have not read (except "The Island", great story). I think some of these stories can be found for free on the Internet.

In my opinion this is not his best work, but a less accomplished novel by Peter Watts is preferable to a good novel by many other authors.

Frontera oscura de Sabino Cabeza.

Me he pasado media lectura pensando que este libro no merecía un Minotauro. El premio Minotauro, ufff, el mejor galardón del fantástico español, superando en prestigio incluso al UPC, bla, bla… Pero qué tontería, si mal no recuerdo esta es mi primera lectura de una obra ganadora, por lo que igual resulta que mi expectativa era desmesurada y mi presunción… pues eso, un poco presuntuosa.

El caso es que en algún momento, a partir de la segunda mitad de la novela, la trama gana en interés y la lectura me resulta más cautivadora. ¿Qué ha pasado? Yo creo que el estilo del autor no ha variado, ni tampoco el ritmo ni nada de eso. Simplemente en algún punto indeterminado se ha establecido una conexión entre la obra y el buen aficionado a la ciencia ficción que me considero (aficionado pero con unas cuantas lagunas, todo sea dicho).

Total, que para mi propia sorpresa, he terminado el libro pensando justo lo contrario, que es para novelas como esta que deben existir premios como el Minotauro, para proporcionar una oportunidad a carreras prometedoras como la de Sabino Cabeza, a quien deseo lo mejor y me quedo con ganas de leer más cosas suyas.

Sobre la historia en sí, muy brevemente: un buen relato de aventuras espaciales de corte clásico es siempre celebrado. Como sabéis, El espacio, la última frontera… .