Hoy hace
un año, aproximadamente a esta misma hora en que los niños ya
duermen, es decir, que por fin han dejado de soñar despiertos en lo
que les traerán los Reyes Magos, escribía la presentación del
blog.
Repasando
la entrada, contaba entonces que no tenía una idea clara sobre su
contenido. Bien, no es que haya avanzado mucho. Incluso el título
continua pendiente. Así que por el momento debo ser pragmático: el blog es... lo que hay escrito en él.
Lo que sí que tengo claro es que escribir
un blog es de lo mejor que me ha pasado últimamente. He
aprendido un montón de cosas y espero seguir aprendiendo muchas más.
Algunas entradas, por ejemplo la última han ido muy rodadas; espero
que la experiencia tenga algo que ver en eso. Otras las he rehecho
una y otra vez puesto que ninguna versión me dejaba convencido y una
acabó archivada en la papelera. El parón de la primera mitad del
año se debe a que intenté escribir un relato con el resultado que
podéis imaginar (como diría un T-800: I'll be back). Además (¡Ejem!) para ser honestos también confieso algún que otro ataque de
procrastinacionitis aguda.
Por descontado soy
consciente que debería mejorar algunos aspectos, por ejemplo la
periodicidad, pero no puedo quejarme: estoy aquí y espero continuar
dándoos la vara con mis reseñas.
Nada,
que me gustaría agradeceros, amables lectores y lectoras, todas y cada una de
las visitas recibidas. Espero que los artículos como mínimo os
hayan resultado amenos, y si habéis hecho caso de alguna
recomendación que ésta sea acertada. También
mencionar a los que en algún momento me habéis dado un empujoncito
o bien habéis resuelto alguna de mis (numerosas) dudas, vosotros ya
sabéis quienes sois.
Un
ciber-abrazo a todos.
Mis mejores deseos para este año. Un beso.
ResponderEliminarUn besote también para ti, Mar.
ResponderEliminarMuchas gracias, te deseo lo mejor :-)