Recién terminada The Quantum Thief de Hannu Rajaniemi le estoy dando vueltas a la siguiente pregunta: ¿Qué clase de ciencia ficción he estado leyendo?
Me explico: esta lectura me produce una sensación peculiar. Se trata de una intuición, claro, no de algo sobre lo que haya meditado. Ni tan sólo sé explicarlo en este mismo momento. Por algún motivo esta novela me resulta familiar pero a la vez también me ha parecido una lectura diferente, distinta a las demás.
Vamos a pensarlo un poco, pues. ¿Qué tiene de particular The Quantum Thief? Por ejemplo, su intensidad especulativa. En cada página, podríamos decir que casi en cada párrafo uno puede encontrar elementos cienciaficcionales. Conforme avanza la narración no deja de sorprender e incluso en algún momento tanto sentido de la maravilla consigue contagiarte una sensación de euforia. Además, la novela también asombra por la radicalidad de su argumento, tan atrevido que le lleva a pensar a uno “¡La madre que...!” (la madre de Hannu, se entiende).
Lo que me está rondando por la cabeza es el tema de los subgéneros. Bien, primero debería encontrar obras afines. Que yo recuerde sólo estas dos me han transmitido una experiencia similar, ambas leídas hace ya algún tiempo: The Golden Age, de John C. Wright y Diaspora de Greg Egan. No sé de otras obras parecidas, posiblemente debido a mi limitada experiencia lectora, aunque seguro se quedan en el tintero algunos relatos. Está claro que podría tener en cuenta obras de otros autores, maestros como Peter F. Hamilton o el recientemente malogrado Iain Banks pero por decirlo de alguna forma -y sólo en este sentido- se quedan a medio camino.